jueves, 24 de julio de 2014

Novela: "Amor Prohibido"


Breve epílogo



El tiempo pasa muy rápido para todos, y para Lali y Peter no iba a ser distinto. Después de nacer Ismael y Peter, la madre de Lali estuvo un par de semanas viviendo con ellos, para ayudarla con los puntos del parto y con todo lo necesario en cuanto al cuidado de sus hijos, ya que hay que recordar que eran dos, y que había que dedicarles mucho tiempo a lo que, Lali a veces, no daba a basto. Su amiga Euge también estaba mucho por casa, visitando y echando una mano, así que Lali en ningún momento se sentía sola. Además, a pesar de que a muchas madres les hubiera podido el agobio y el estrés, la felicidad de Lali era tan grande que lo veía todo con otra filosofía, a todo le ponía buen humor y nada le suponía demasiado esfuerzo. También Peter la ayudaba en cuanto podía y se lo hacía todo más llevadero. Peter estuvo un tiempo preparándose las pruebas de policía y las aprobó, por lo que entró rápidamente a trabajar al cuerpo policial de Forks. A Lali, tiempo después, le volvieron a ofrecer trabajo en la Universidad de Forks, donde le dio clase a Peter, ya que había una vacante libre y sabían que había sido madre. Ella había dicho que por ahora no, que quería dedicarse plenamente y únicamente a sus hijos y a su marido, pero no descartaba la posibilidad de volver algún día.

Por otra parte, el padre de Peter había encontrado una mujer, una buena mujer que según él “le había hecho la vida más fácil” y estaba muy feliz con ella, por lo que Peter también estaba mucho más tranquilo de saber que ya no estaba solo, y que había alguien que cuidaba de él.

En un par de años, la vida de Peter y de Lali había dado la vuelta por completo. Lali, la chica que salía de una tormentosa relación, queriendo huir de su pasado, llegó a Forks y como cosa del destino se encontró con Peter, que mejoró su vida rápidamente. En cuanto a Peter, aquel chico que se mataba a trabajar para pagarse sus estudios, cuidando de su padre alcohólico y para el que lo más importante de su vida eran sus estudios, cambió rápido al conocer a Lali. El loco destino los unió en un amor único, un amor que comenzó siendo un amor prohibido, clandestino, y que terminó siendo un amor tan grande y puro que les llevó a la inmensa felicidad en la que vivían inmersos.

Ahora, habían formado una familia, habían creado algo precioso y habían forjado unos lazos entre ellos dos que sabían que, pasara lo que pasara, ese lazo siempre estaría unido por su inmenso amor.

Muchas personas se preguntan qué pueden hacer para ser más felices o cuál es el secreto de la felicidad, si es que existe algún secreto que puedan descubrir y poner en práctica para cambiar sus vidas y sentirse más satisfechos y felices. 
Para alcanzar la felicidad, muchos tienden a mirar hacia el futuro, piensan en lo que no tienen y desearían tener, en cómo lograr ese objetivo que les haría sentirse felices, y tratan de luchar con uñas y dientes para alcanzar esa meta que, supuestamente, traerá la felicidad a sus vidas.
Otros miran hacia el pasado, lamentando oportunidades perdidas, errores cometidos, culpándose y castigándose por no haber actuado de otra forma y pensando que, si lo hubieran hecho, ahora serían mucho más felices; de ese modo se torturan dando vueltas en su mente a sus errores pasados, aquellos que ya nunca podrán cambiar.
El problema es que la felicidad no existe ni en el futuro ni en el pasado. Es un estado emocional, un estado interno, que sólo puedes sentir en el presente. Puedes recordar un suceso pasado que fue positivo y sentirte contento al recordarlo, pero esa felicidad la estás sintiendo ahora, la vives ahora, la experimentas en el momento presente, no en el pasado, y eso es lo que le da valor, lo que la hace real y lo que todo el mundo busca cuando afirma que quiere ser feliz.

FIN

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Bueno, quería hacer una especie de "final" de "cierre" a la novela, pero no es exactamente un epílogo, algo parecido. Espero que os haya gustado y gracias por las que habéis estado siempre ahí.
Si vosotras queréis mañana mismo empiezo la nueva nove, ya está escrita y estoy segura de que os gustará:)
Besos y gracias!

Novela: "Amor Prohibido"


Capítulo 48

En un abrir y cerrar de ojos, ya estaban de camino al hospital. Peter agarró una bolsa con todo lo necesario para llevarse al hospital y ropa para Lali y los bebés. Agarraron el coche de Lali y montaron los cuatro, camino al hospital.

-Voy a avisar a tu madre-dijo Euge y Lali asintió.

Conversación telefónica.

-Hola, sí, te llamo para decirte que Lali ha roto aguas. Sí, se le ha adelantado un mes, lo sé, Peter está demasiado nervioso para ponerse, de acuerdo, no te preocupes nosotros te 
vamos avisando. Vale, un beso.

-Se ha puesto algo triste porque teníais hablado que vinieran el mes que viene a vuestra casa y os ayudaran con el tema del parto y todo. Para hoy no puede venir pero dice que mañana coge el primer vuelo que haya-Lali asintió. Sólo asentía, en el asiento de atrás, mientras respiraba profundamente repetidas veces, agarrada a la mano de Peter.

Cuando llegaron al hospital, la pusieron en una silla de ruedas hasta que un médico la atendió, y la entraron a una habitación, para que se tumbara en una camilla.

-Veamos, ¿cada cuanto tiempo tienes contracciones?

-Cada… ¿10? Quizá 5, no sé, cada vez son más fuertes y más seguidas-dijo haciendo una mueca de dolor.

-Entonces es buena señal-le sonrió-vamos a ver cuánto has dilatado-musitó mientras se ponía los guantes.

-Pero doctor, a ella le tocaba dentro de un mes, ¿no ocurre nada?

-Hay veces que por sufrir distintas emociones o cualquier situación el parto se adelanta, ya puede ser días, semanas o meses, hubiera sido preocupante si llega a ser meses antes, pero con tan sólo un mes de antelación no hay ningún problema, veamos-el médico se arremangó y comprobó la dilatación de Lali.-Estás en unos 6 centímetros, y tienes que llegar hasta 10-Lali abrió los ojos como platos.

-¿Qué? Oh, dios mío, no sé si voy a poder-tiró la cabeza para atrás.

-Claro que vas a poder, ya te queda nada-le dio unos pequeños golpecitos en la pierna-en un ratito vuelvo.

Para ambos, ese fue el día más largo de sus vidas, sobre todo para Lali. Pensaban que nunca llegaría el momento, hasta que llegó. Lali se encontraba tumbada, en la camilla, rodeada de médicos y con Peter al lado, alentándola.

-Vamos mi amor, ya queda poco, tú puedes-le apretaba la mano. Lali estaba empapada en sudor, respirando profundamente. Empujó con todas sus fuerzas.

-Mira papá-le dijo la matrona-aquí viene el primero, asómate-Peter hizo lo dicho y vio la cabeza de su primer hijo, Peter Lanzani Espósito. Un par de lágrimas cayeron por su rostro. 

Un par de minutos después llegó el segundo, Ismael. Le dejaron cortar el cordón umbilical y él lo hizo encantado.

Media hora más tarde, Euge y Pablo entraron a verlos, después de que limpiaran a los bebés y los vistieran. Lali tenía en brazos a uno, y Peter a otro. Se observaba una estampa familiar preciosa.  También entró a visitarlos el padre de Peter, y una cantidad de amigos y conocidos.


Sin duda para los dos, ese fue el día más emotivo e importante de sus vidas, un día que jamás olvidarían y que siempre recordarían como el más bonito. Una experiencia inolvidable para ambos. Ahora sí, empezaba una nueva vida para ellos, con dos personas más en su familia, rodeadas de paz y de amor.

Novela: "Amor Prohibido"




Capítulo 47

Peter y Lali agradecieron a los policías por su trabajo, y especialmente a Marcos, un muy buen amigo de Peter.

-¡Eh, Peter!-lo llamó-una cosa más-se acercó junto a él y a Lali.

-Quería proponerte con tu mujer aquí… sé que vas a ser padre y como ya sabes yo soy desde hace muy poco-Peter frunció el ceño, confundido- Además… acabas de graduarte en el grado de criminología y hoy has demostrado astucia y valor con todo este caso, así que… me gustaría proponerte que si cuando tu mujer dé a luz te gustaría incorporarte al cuerpo policial, haciendo las pruebas necesarias para poder incorporarte obviamente-Peter miró a Lali, y ella le sonrió, observando ese brillo especial que desprendían sus ojos verdes.

-Me encantaría-se dirigió a Marcos al final-sería un honor, es lo que siempre he querido y no imaginaba conseguirlo tan pronto-ambos se abrazaron-muchas gracias.

Al fin se despidieron de Marcos y volvieron a casa, junto con sus mejores amigos.

-Chicos, siento que todos os hayáis pedido el día libre, pero creo que deberíais volver-musitó Peter.

-¿Estás de broma? Es como si hubiéramos empezado de nuevo, entrar a casa de nuevo me ha dado otra sensación a cuando he salido esta mañama. Estoy feliz, muy feliz. Y nada me apetece más que pasar el día contigo -le dejó un dulce beso en la comisura de los labios.

-¡Sí! Además esto merece una celebración, ¿no?-sonrió Euge.

-¡Voy a buscar algo!-se fue Pablo hacia la cocina.

-Eh, espera, que tú eres capaz de traerte todo el mini bar-fue Peter tras él y las chicas rieron.

-Ay amiga-la abrazó Euge-¡me alegro tanto, tanto! Ahora vas a poder estar tranquila, nunca más os va a molestar.

-Sí, la verdad es que si ya era feliz antes, ahora con esto mi felicidad es completa, ahora puedo vivir tranquila junto a mi hermosa familia-sonrió y Euge le devolvió la sonrisa.

-Pero que sepas que esto podría haber acabado muy mal con tu arrebato de quedar con él-le regañó con el dedo índice levantado- por suerte todo ha salido bien, pero podría haber terminado en una desgracia. Ese hombre está loco. Y sigo enfadada contigo por haberte marchado así y no decirme nada-Lali la abrazó de nuevo.

-No te enfades porfi-le puso voz de nena y la abrazó de nuevo-lo siento, ya lo sé y tienes razón en todo, pero sé cómo eres y si te lo hubiera contado te habrías puesto como loca, y lo sabes-dijo antes de que Euge pudiera abrir la boca y ella rió, sabía que su amiga tenía razón-lo importante es que estoy aquí ¿vale? que estamos todos, juntos.

-¿Y has hablado con tu madre?

-Sí, me ha llamado enseguida y no he podido hablar mucho con ella, pero le he contado por encima y sabe que ya está todo bien.

-¡Aquí estamos!-gritó Pablo con tres copas en la mano y una botella de vino blanco.-La, a ti te he traído una coca-cola-le mostró todos los dientes.-Bueno-dijo rellenando las copas-por los amigos-levantó su copa y todos brindaron.

Lali comenzó a sentir unos dolores muy fuertes en su vientre y comenzó a notar  algo frío que recorría sus piernas. Miró para debajo y se puso pálida. Había roto aguas.