viernes, 27 de junio de 2014

Novela: "Amor Prohibido"

Capítulo 36




Lali fue la primera en levantarse, comenzaban sus náuseas matutinas. Miró a Peter durmiendo a su lado y no pudo evitar sonreír. Intentando no hacer ruido bajó a la cocina y preparó un zumo de naranja, un par de tostadas, cuatro croassans y un café con leche. Lo puso todo en una bandeja y subió a la habitación. Puso la bandea sobre la cama y se sentó, dejando pequeños besos sobre el rostro de Peter.

-Bello durmiente... levanta, vamos...-susurró Lali dulcemente.

-Um... que bien sienta despertar así-sonrió aún con los ojos cerrados-¿Qué hora es?

-Las once y media bonito, hemos dormido bastante-Peter por fin consiguió abrir los ojos y besó a Lali.

-¿Qué es esto? ¿Me has traído el desayuno?-dijo emocionado, agarrando la bandeja.

-Ajá-sonrió Lali.

-Si esque me he casado con la mejor-le besó la mejilla mientras masticaba un pedazo de croassan. 

-¿Has avisado a tu padre de que ya estamos en casa? yo acabo de avisar a los míos

-Se me había olvidado, voy a llamarle-mientras tanto Lali se quedó almorzando del desayuno de Peter.-ya está.

-¿Como está? ¿Lo has escuchado bien?

-Sí, la verdad es que bastante tranquilo.

-¿Y tú estás tranquilo?

-No me siento demasiado bien habiéndolo dejado así de repente, tan rápido y pasar de hacérselo yo todo a dejarlo solo y que se las arregle él mismo. Me tranquiliza que está Vicky-Victoria era una vecina que conocían de hacía años, incluso conocía a su madre y siempre ha intentado ayudarles en todo-ella se pasa muchas veces por casa a llevarle comida o ver como va todo.

-Mi amor, él es mayorcito, va a estar bien y va a saber cuidarse. No es la primera vez que le toca enfrentarse a algo así, y eso no se olvida-le agarró de la mano-y sabes que puede venir aquí siempre que quieras, no estamos tan lejos, puede quedarse unos días si te quedas más tranquilo.

-No es mala idea-sonrió ilusionado-así al menos estaríamos tú y yo con él y no se sentiría tan solo, y podríamos ver que tal está de verdad. Pero... no, ni si quiera llevamos una semana viviendo solos, meter ya a mi padre aquí...

-Pit, ¿y que más da eso si tenemos toda una vida para estar solos? tu padre no va a quedarse para siempre, no me importa, enserio-Peter esbozó una enorme sonrisa

-Te quiero

El timbre de la casa sonó.

-¿Quién es ahora? ¿esperas a alguien?-preguntó Peter

-Yo no, voy a ver-se levantó Lali de la cama.

-¡La! No, voy yo, quédate aquí.

-Pero Pit...

-Que voy yo-se levantó de la cama y bajó rápidamente las escaleras. Lali se quedó algo preocupada. Cuando llegó abajo miró por la mirilla y al ver quienes eran suspiró de alivio. 

-¡Buenos días recién casados!-gritó y al escuchar esa voz Lali bajó rápidamente.

-¡Euge!-ambas amigas se abrazaron como si llevaran años sin verse

-¡Hola Pablo!-lo abrazó también-¿qué hacéis aquí?

-Haceros una visitilla-musitó Pablo

-Y a que nos contéis vuestro bonito viaje de enamorados-sonrió Euge.

-¡Espera voy a por la cámara y os muestro todas las fotos!

-¡Ay sí, quiero saber todo!-Peter y Pablo se miraron y pusieron los ojos en blanco.

-Chicos, ¿queréis tomar algo?

-Si me haces un café te lo agradecería cuñadito-dijo Euge.

-Claro, ¿me acompañas a la cocina Pablo?

-Ahora vuelvo a ver las fotos chicas.

Entraron ambos en la cocina. Peter se pusó frente a él, serio

-Necesito contarte algo.





miércoles, 25 de junio de 2014

Novela: "Amor Prohibido"

Capítulo 35



Peter y Lali en unas horas aterrizaron, y agarraron un taxi para que les llevara al puerto, dispuestos a embarcar. Iban a realizar un increíble crucero de 7 noches haciendo escala en Jamaica, Gran Caimán y México entre otros lugares. Peter decidió olvidarse por una semana del correo de Benjamín y disfrutar del viaje junto a su amada esposa. Fue una semana de relax total, una semana de ensueño. Estuvieron en el spa, en la piscina del barco, de cena tras cena romántica, visitando todos sus destinos, mirando tiendas, realizaron buceo, visitaron cantidad de lugares increíbles, se dieron todo su amor, y disfrutaron totalmente el uno del otro. La semana les pasó en un abrir y cerrar de ojos. Cuando quisieron darse cuenta era hora de volver a casa.

Por fin habían llegado, era media noche cuando llegaron a Forks, estaban agotados. Peter y Lali por fin iban a dormir en su casa, de ambos, por primera vez desde la boda. Euge se había quedado la casa de Lali, donde casi siempre estaba Pablo con ella. Ahora Peter volvería al trabajo y acabaría su curso, al igual que Lali que continuaría con las clases a los niños.

-¡Qué gusto poder volver a casa contigo por dios, y saber que mañana voy a despertar contigo!-exclamó Peter

-Lo sé, me hace tanta ilusión poder estar día a día contigo.. y en esta preciosa casa que hemos creado, dios, me encanta como ha quedado.

-La verdad que sí, es un sueño todo esto que estoy viviendo contigo cariño-le agarró la cara a Lali y la besó dulcemente.

-Te amo-sonrieron ambos

-Voy a subir todas las maletas arriba y ¿qué te parece si bajo y nos hacemos algo rápido de cena? es tarde y estamos cansaditos del viaje

-Me parece estupendo, y mejor idea me parece pasar mañana todo el día contigo en la cama, sin tener nada que hacer.

-Si no llega a ser domingo mañana me muero, te lo juro-rió-ahora bajo.

Peter dejó las maletas en la habitación y quedó observando lo bonita que les había quedado. Posteriormente, fue a la habitación que sería de su hijo/a. La habitación estaba pintada de azul claro, ya que todavía no sabían el sexo, y había una cuna, un par de muebles, y un cambiador con pañales, chupete, biberón y ropa para el bebé. Orgulloso de lo que habían logrado construir, bajó junto con su esposa.

-¿Y mi vida? ¿que te apetece cenar?-preguntó entrando en la cocina

-La verdad que hoy no tengo demasiada hambre, ya me hinché bastante a comer en el crucero

-La verdad que pensé que ibas a acabar con todo-Peter rió

-¡Malo!-le golpeó el hombro

-Mi amor estás embarazada es lo más normal, ahora comes por dos. Dime preciosa, ¿qué cenamos?

-Mmm... ¿qué te parece un bocadillo? es rápido

-Había pensado exactamente lo mismo-sonrió

Se hicieron sus bocadillos y cenaron juntos. Al terminar, subieron a su habitación, y por primera vez se acostaron en su nueva cama. 

-Buenas noches amor mío, hasta mañana-lo besó Lali

-Buenas noches princesa

-Te amo-dijeron al unísono y poco a poco se fueron quedando dormidos, recordando el maravilloso viaje que habían realizado y increíblemente felices de lo que estaban viviendo juntos.



martes, 24 de junio de 2014

Novela: "Amor Prohibido"

Angie la novela no es muy larga, pero todavía quedan algunos capítulos, todavía tienen que pasar muchas cosas. Enseguida que termine de subir esta, subiré la otra que ya está toda y os encantará:)


Capítulo 34


Peter y Lali decidieron pasar la noche en un hotel por el estado en el que se encontraba Lali, Peter quiso que ella estuviera descansada para por la mañana dirigirse hacia al aeropuerto y emprender el viaje de su Luna de Miel.

-Dios, no puedo ser más feliz, ahora mismo te juro que no-se tiró Peter sobre la cama, y Lali se puso a su lado, mirándolo.

-Yo tampoco, la verdad es que ha salido todo genial, mi bonito esposo-sonrieron los dos.

-Eso suena tan bien…-Peter dio la vuelta a Lali, poniéndola a ella boca arriba y quedando él encima.-Y no me puedo creer que mañana nos vayamos por una semana al Caribe. Tú y yo, solos, sin nadie más, en el paraíso.

-Ummmm… ¿Habrá que celebrarlo no? Hoy es nuestro primer día como casados-sonrió. Peter la agarró de la cara y la besó fogosamente. Introdujo su lengua en la boca de Lali y saboreó cada centímetro de sus labios.

-Te amo-le acarició la cara.
-Te amo

Lali se levantó, y se giró para que Peter pudiera deshacerse de su vestido, quedando en ropa interior y dejando al descubierto su acentuada barriga. Lali hizo lo mismo con Peter, comenzó deshaciendo su corbata, y poco a poco se deshizo de su traje, desabrochando su camisa botón a botón, mientras iban dejándose besos uno al otro por todo su cuerpo. Poco a poco fueron fundiéndose en su amor, en ese amor único que sólo ellos dos comprendían, pasando una noche entre besos y mimos.

Al día siguiente, Peter y Lali se levantaron muy temprano. Se pegaron una ducha, se vistieron, agarraron sus cosas y fueron camino al aeropuerto. Esperaron sobre una hora, y entonces subieron al avión. Ya sentados, Peter tenía la mano de Lali agarrada.

-¡Vamos! ¿todavía te da miedo? No es la primera vez que viajamos mi amor.

-No tengo miedo, mientras vosotros-dijo tocando la barriga de Lali-estéis a mi lado no tengo miedo, de verdad.- Lali sonrió tiernamente.

-Tengo muchas ganas de este viaje, y parece que el bebé también, hoy está bastante nerviosito-los dos rieron.

-Sabrá que nos vamos de viaje, ¿verdad pequeño?-dijo acariciando su barriga.

-Pit-puso los ojos en blanco- no sabemos si va a ser chico

-Yo lo presiento La, va a ser chico.

-Y si después no es ¿qué? ¿vas a decepcionarte?

-Si después es una chica, entonces me tocará hacer de padre protector.

-¡De eso nada! No vas a agobiar a la nena-los dos rieron divertidos.

-Por cierto… habrá que ir pensando en nombres ¿no? Con todo el lío de la boda no hemos hablado nada.

-En un par de semanas sabremos el sexo

-Sí, me muero de ganas. ¿Entonces nos esperamos a saberlo para decidir el nombre?

-Así es-asintió Lali y se puso las manos en la barriga

-¿Estás bien, está bien el bebé?

-Sí cariño, sólo necesito ir al aseo-sonrió-me hago mucho pis.

El móvil de Lali vibró un par de veces.

-A ver si es su madre preocupada-susurró para sí mismo.

¡Tienes un nuevo correo en tu bandeja de entrada!

Lali nunca recibía spams ni ningún tipo de publicidad a su correo, ya que lo utilizaba exclusivamente para el trabajo y para que le escribieran ahí las personas más cercanas a ella, poca gente sabía de ese correo. Pero… la habían despedido y cualquier persona de su familia le habría mandado un whatssApp. Peter miró si Lali venía o si iba a tardar, para avisarle que iba a mirarlo. A Peter le extrañó que tuviera un correo y curioso entró a la bandeja de entrada para ver de quien era.

Al entrar leyó De: Benjamín. Peter frunció el ceño.

¡Hola preciosa! Sólo desearte una feliz luna de miel. Estuve ayer en la iglesia, no podía perderme vuestra fantástica boda, estabas realmente guapa, lo pasé genial. Me sorprendió mucho tu barriga, no sabía que ibas a ser madre, una lástima que no haya sido conmigo pero ¡felicidades! Nos vemos pronto, disfrutad de esta bonita semana solos. Un beso para Peter! ;)

Peter apretó el puño con rabia, y entonces escuchó a Lali venir.

¿Eliminar mensaje? Aceptar

Peter dejó el móvil y Lali volvió a su asiento. El avión despegó. Se dirigían hacia su destino.




lunes, 23 de junio de 2014

Novela: "Amor Prohibido"

Inma: muchas gracias como siempre por estar ahí y comentar, me muero de ganas de que subas nueva nove:)

Angie: me alegro que te guste y muchas gracias por firmar!! Besos!


Capítulo 33




Se encontraban  festejando en el convite, bailando y riendo. Los invitados estaban comiendo en sus respectivas mesas, pero Peter y Lali estaban haciendo de todo menos comiendo, iban de mesa en mesa saludando a cada uno de sus invitados.


-¡Mi amor!-hizo señas Peter a Lali para que se acercara.

-Hola precioso-le dio un beso y los dos sonrieron

-Aunque ya lo has visto, tengo que presentarte a alguien oficialmente. Él es mi padre-Lali al verlo por primera vez quedó sorprendida, pues era un hombre corpulento, no aparentaba estar nada estropeado, aunque sí lo estaba y ella lo sabía. Era alto como Peter, con sus mismos ojos. Tenía cabellos oscuros y se apreciaba que estaba recién afeitado y además muy bien perfumado. Iba muy elegante con su traje y su corbata. A primera vista, parecía un hombre sano y fuerte, y no era una cosa ni la otra. A Peter lo llamaron sus amigos-disculpadme un momento.

-Por fin te conozco-sonrió él y se le acentuaron unas pequeñas arrugas alrededor de sus ojos y su frente,  pero para la sorpresa de Lali, también tenía una bonita dentadura.-Peter no me había mencionado lo preciosa que eras, encantado de conocerte-su sonrisa no era muy grande, pero era sincera y amable.

-Muchas gracias-sonrió Lali-para mí también es un placer conocerte, tenía muchas ganas, me han hablado mucho de ti.

-Me imagino que no muy bien-rió. Lali iba a decir algo pero él lo interrumpió-tranquila, no le culpo. Ha tenido que ser muy fuerte ¿sabes?

-Lo sé, se todo lo que ha hecho para seguir adelante, y para sacarte también a ti-él agachó la cabeza, algo avergonzado.

-Es duro para un padre ver como su hijo se mata a trabajar, y ver como tú no puedes hacer nada por él, que dependes de él.

-Pero tú sí podrías haber hecho algo por él, para evitar que él cargara con todo ese peso desde hace años.

-Supongo que mejor darse cuenta tarde que nunca ¿no? Estoy intentando cambiar, intentando no beber más, y estoy intentando conseguir una buena relación con él.

-Lo sé, y él está muy ilusionado, espero que no cambie y no lo decepciones, porque le hundiría mucho.

-Es mi hijo, Lali, lo quiero más que a nada en el mundo.

-Ya somos dos-le interrumpió

-Lo que quiero decir es… que yo tampoco quiero decepcionarle, no quiero que me odie, ni que siga viéndome como una carga para él. Quiero poder ver a mi nieto por navidad, por su cumpleaños, poder ir a visitaros siempre que quiera, que no se avergüence de su padre…-Lali le agarró la mano.

-Siempre vas a poder ver a tus nietos, y las puertas de nuestra casa siempre van a estar abiertas para ti, eres de nuestra familia. Pero que Peter quiera verte eso depende tan sólo de ti

-Ya estoy -apareció Peter-¿cómo va todo por aquí?

-Muy bien, estábamos charlando-musitó Lali.

-¿De qué charlabais?

-Cosas de suegro y nuera-sonrió su padre

-Me voy a seguir saludando a los invitados chicos, un placer Jaime-dijo Lali dedicándole una sonrisa, y éste se la devolvió.

-Has elegido bien hijo, has elegido muy bien-le dio un par de golpecitos en la espalda-además de muy guapa, es una chica fantástica.

-Lo sé-sonrió Peter, observando desde lejos a su esposa.

La boda fue maravillosa, Peter presentó a Lali a todos sus familiares y amigos, y Lali hizo lo mismo. Se hicieron fotos con todos. Bailaron el vals y después todo tipo de canciones con los invitados. Cortaron la tarta. Celebraron, bebieron, brindaron. Fue un día para no olvidar.




viernes, 20 de junio de 2014

Novela: "Amor Prohibido"



Capítulo 32



4 meses después...

-A ver... no te estreses, lo tenías hace nada en la mano, mira, aquí esta, ¿lo ves?-dijo Eugenia agarrando un pequeño ramo de flores que había sobre la mesa del salón de la madre de Lali.

En estos cuatro meses, las cosas habían cambiado bastante, todo había avanzado muy rápido. Era el día de la boda de Peter y Lali, que decidieron casarse antes de que naciera su bebé, y en poco tiempo con ayuda de sus familiares y amigos, consiguieron organizar la boda para justo 4 meses después. Se encontraban ambos en Houston, de donde era la familia y amigos de Lali, y a donde Peter accedió a casarse después de hablar bastante sobre el tema. Allí viajaron todos los amigos de Peter, para asistir al día de su boda, e incluso su padre, quién había mejorado mucho desde la última vez que Peter habló con él. En cuanto se enteró de que iba a ser padre, Peter habló con el suyo, y le advirtió que si quería conocer a su nieto debía cambiar, o que se olvidase tanto de él como del mismo Peter. Lali lo conocería en la boda, ya que Peter quiso darle ese margen de cuatro meses para que dejara un poco de lado el alcohol y mejorara, y así que Lali lo viera más presentable. Y había conseguido superar un poco su adicción, pero a cada cierto tiempo volvía a recaer. Aún así, su relación con Peter había mejorado bastante, y le había demostrado que no quería que desapareciera de su vida, participando mucho más en las tareas de casa, ayudándolo, buscando trabajo y siendo más amable con él, Peter estaba contento de que almenos lo intentara. En cuanto a Lali, no le había presionado más sobre ese tema, y había respetado que Peter quisiera que lo conociera en su boda. El padre de Lali fue el que se ofreció a pagarlo todo, tanto el banquete como el viaje de luna de miel. Peter no estaba nada de acuerdo con eso, pero viendo la cabezonería de su futuro suegro no le quedó otra opción que aceptarlo finalmente, ya que además les vendría muy bien tanto a Lali como a él ahorrarse su propio dinero. 
Por otro lado, su amiga Euge había encontrado trabajo como camarera poco tiempo después de hacer entrevistas, y había conseguido que Lali trabajara dando clases particulares a los dos hijos de su jefa, por lo que las dos tenían sus propios sueldos, no demasiado altos pero suficientes para poder pagar la hipoteca, además, a ambas les ayudaba su familia para que no tuvieran que pagarlo todo ellas solas. Por su parte, la familia de Lali también se había tomado muy bien tanto el tema del embarazo como el de la boda, así que todo iba genial, Peter y Lali no podían ser más felices, y su amor crecía cada día. 

-Lali respiró hondo-¿Sabéis si Peter ha llegado ya?

-Acaban de llegar ahora, tranqulízate o va a darte un ataque-contestó su madre desde la otra habitación. Llevaba un vestido color calabaza, con unos tacones blancos y el pelo recogido en un moño, con un pequeño tocado. Euge, por su parte, llevaba un vestido verde claro, que favorecía sus ojos, unos tacones beis a juego con un pequeño pañuelo que llevaba para cubrise los hombros. En cuanto al pelo lo llevaba suelto, recogiendo dos mechones de delante y llevándolos atrás con un par de orquillas.-Estás preciosa-se quedó observándola su madre por enésima vez, con la mano en la boca para evitar llorar.

-Bueno, con esta barriga se hace lo que se puede-dijo intentando ajustarse el vestido para que se le disimulara un poco. A pesar de estar de cuatro meses, ya se apreciaba un notable bulto en su barriga. 

-No digas tonterías, esa barriga te hace verte todavía más bonita-discrepó Roció, una de las mejores amigas de Lali. Ella llevaba un vestido morado, con unos tacones negros, y su larga melena rubia suelta. 

-Bueno, venga, no demoremos más que el novio espera chicas-musitó Euge entusiasmada.

-Y tu padre también, estará desesperado por verte-añadió su madre, agarrándole la mano a Lali.

En cuanto a la novia, parecía una princesa. Por delante, el vestido dejaba ver un pequeño escote, no era exagerado, y eso daba una visión más fina y elegante. Los tirantes junto con la parte del pecho eran de encaje, y se ajustaban perfectamente al cuerpo de Lali. De cintura para abajo, el vestido era más ancho, dejándose caer y de textura lisa. La parte de la espalda también era de encaje y en forma de pico, dejando gran parte de ella al descubierto. En el pelo, llevaba un recogido en la parte de atrás de su cabeza, sujetado y enganchado con una trenza que le pasaba por toda la cabeza. Llevaba un par de flores en el pelo, a conjunto con el vestido, y para finalizar el velo. Además, ella llevaba puesto el complemento más importante: su sonrisa. Ese brillo especial que desprendía al sonreír, y que de ninguna de las maneras se le borraba del rostro.

Entraron al coche, que conducía Eugenia. De copiloto iba Rocío, y detrás, su madre, sin soltarle la mano un segundo. 

-Llegamos-exclamó Rochi, con una sonrisa mirando a Lali. Las dos amigas bajaron del coche y abrieron la puerta para que bajara la novia. Su padre, que se encontraba fuera del coche esperándola, se quedó atónito al verla. Ella se acercó a él sonriendo, le besó la mejilla y él no pudo evitar emocionarse. 

-Mi vida nos vemos dentro, suerte, te quiero-la besó su madre y entró a la iglesia, de nuevo emocionada. Sus amigas la abrazaron fuerte, le dedicaron su mejor sonrisa y entraron. Lali respiró hondo y miró a su padre.

-¿Estás lista, mi pequeña?

-Más que nunca-sonrió ella y le agarró de la mano. 

-Entonces vamos allá-le devolvió la sonrisa.

Padre e hija entraron juntos. Lali agarraba el brazo de su padre, mientras a su vez tenían sus manos enlazadas. Lali no dejaba de ver caras conocidas sonriéndole: amigos, familia... todos comentaban lo deslumbrante que estaba ella. Finalmente, ahí vio a sus cinco mejores amigas, a su madre junto con sus hermanos y al resto de su familia. Al fin dirigió la vista hacia delante, y ahí lo vio, embobado, mirándola, con un brillo especial en los ojos. Su padre la dejó delante de él, y le dio un beso a ella, para después sentarse detrás de ambos. Peter dio un beso en la mejilla a Lali cuando la tuvo cerca.

-No eres real-le susurró y ella sonrió. 

-Amigos-procedió el cura-hoy estamos aquí reunidos para unir a Mariana Espósito y Juan Pedro Lanzani en sagrado matrimonio.-Peter y Lali no podían escuchar mucho al cura, ya que no podían dejar de pensar el uno en el otro, y en la vida que les esperaba juntos.

-Yo, Juan Pedro Lanzani, te tomo a tí Mariana Espósito, para amarte y respetarte, para cuidarte y serte fiel, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte nos separe-le puso su alianza.

-Yo, Mariana Espósito, te tomo a tí Juan Pedro Lanzani, para amarte y respetarte, para cuidarte y serte fiel, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte nos separe-realizó el mismo procedimiento.

No podían dejar de sonreír mirándose a los ojos.

-Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre. Yo os declaro marido y mujer.

Peter se abalanzó sobre Lali, besándola como si no hubiera un mañana, mientras le agarraba la cara con las dos manos.

-¡Viva los novios!-gritó Stefano.

-¡Viva!-respondió toda la iglesia al unísono. 


jueves, 19 de junio de 2014

Novela: "Amor Prohibido"

Capítulo 31


En el rostro de Peter fue apareciendo poco a poco una sonrisa, y se abalanzó sobre Lali, tirándola sobre el sofá.

-No lo puedo creer-le apartó un mechón de la cara-me hace mucha ilusión ser el padre de tus hijoa, Lali-ella esbozó una sonrisa todavía más grande.

-Y a mí que lo seas, Pit.

-¿Y has ido al médico?

-No, me he querido esperar a tí. No creo que cuatro test de embarazo se equivoquen, ¿no?

-Claro que no, todo eso está muy avanzado. Dios mío, vamos a ser papás...-musitó como expresando en alto su pensamiento. Lali lo miró sonriendo, pero con una sonrisa medio triste.-¿Qué pasa?

-Siento haberte cambiado tanto la vida, sé que no tengo culpa de nada, pero no puedo evitar pensar que he cambiado totalmente tus planes de vida-Peter le agarró la mano.

-Mi amor, después de tanta mierda en mi vida esto es lo más bonito que podía pasarme, ya me tocaba algo bueno-sonrió tiernamente- No me supone para nada un problema ser padre ahora y nos las apañaremos, ya lo verás, además todavía tenemos 9 meses por delante-los dos sonrieron, se veían más enamorados que nunca.

-Esto...-Lali se subió encima de Peter, con una pierna a cada lado de su cuerpo.-merece una celebración ¿no?-sonrió pícara y Peter la imitó. Él sin dudarlo se lanzó a sus labios, que tanto extrañaba cuando no los tenía. Introdujo su lengua en la boca de Lali, moviéndola de arriba a abajo. Lentamente, le quitó la camiseta a Lali y comenzó a darle besos por su piel desnuda. Lali hizo lo mismo con Peter, se deshizo de su camiseta, y a continuación se desabrochó el sostén. Peter se quedó mirándola, y le acarició los pechos, delicadamente. A continuación, jugó con su lengua sobre los pezones de Lali, haciéndole sentir placer. Peter la agarró y con cuidado, la recostó sobre el sofá, para así poder deshacerse del resto de su ropa. Él realizó la misma acción, quedándose los dos desnudos. Se puso a la altura de la parte íntima de Lali, e introdujo su lengua dentro de ella, haciendo movimientos circulares con ella. Lali emitía pequeños gemidos de placer. Después de jugar con su lengua dentro de la parte íntima de Lali, Peter volvió a incorporarse, apoyando una rodilla en el sofá, para a continuación, introducirse entre las piernas de Lali. Al notar la parte húmeda de Lali, soltó un pequeño gemido. Comenzó con unos lentos vaivenes, pero progresivamente fue aumentado el ritmo, y los dos estaban muy agitados y sudados. Finalmente, Peter dio unos pequeños empujoncitos al final, con fuerza, indicando que había terminado. Se tumbó al lado de Lali, y se quedaron abrazados por un largo rato. Mientras fuera llovía a cántaros y hacía bastante frío, ellos estaban dentro, como Dios los trajo al mundo, ante la chimenea, como si no existiera nada más.

-¿Cariño?-preguntó Lali, que tenía su cabeza apoyada en el pecho de Peter.

-¿Um?

-Quédate a dormir conmigo hoy, por favor-se puso ahora a la altura de su cara, para poder mirarlo a los ojos.

-Está bien-sonrió-llamaré a Lucas, le diré que me perdone mañana, que voy a ir al médico a ver como está mi hijo-sonrieron los dos al escuchar eso.

-Te amo Peter, te amo mucho.

-Yo también a tí preciosa-dejó un pequeño beso sobre su frente.

Como dijeron, cenaron y pasaron la noche juntos, dándose amor y disfrutando de su compañía. Al día siguiente se levantaron, se ducharon juntos y se vistieron para ir al médico. Estaban nerviosos por lo que pudiera decirles, por una parte creían que cuatro test no podían equivocarse, pero por otra, les daba miedo que esas ilusiones fueran eso, ilusiones. Cuando les tocó, llamaron a la puerta.

-Buenos días, doctor.-pasaron Peter y Lali.

-Hola chicos, pasad. Tú eres Mariana Espósito ¿no?

-Así es-el hombre mayor le dedicó una amable sonrisa.

-Túmbate aquí, Mariana-le señaló la camilla y se puso a uno de los lados. Peter se sentó al otro lado, agarrándole la mano-Levanta un poco tu camiseta, para que pueda ponerte esto-dijo agarrando un líquido.-Bien, vamos a ver, esto está un poco frío, veamos...-puso el aparato sobre la barriga de Lali, y fue moviéndolo, de lado a lado, de manera que se monitoreaba en la pantalla. Lali y Peter no dejaban de mirarla, pero no veían nada.

-¿Está todo bien, doctor?-preguntó Peter, algo preocupado.

-Sí papá, no te preocupes que todo está bien-rió el doctor ante su preocupación-¿primerizos no?

-¿Se nota mucho?-preguntó Lali y todos rieron.

-Un poco. Todo está bien chicos, mirad aquí-señaló la pantalla del monitor. ¿Véis esto? es su cabeza, poco a poco iremos viendo más cosas, por ahora se ve poco y no podemos profundizar mucho, pero de momento no tenéis de que preocuparos, vuestro bebé está sano-Lali y Peter se miraron con los ojos brillosos, aliviados y felices.-Enhorabuena papás, ya puedes limpiarte-le dio a Lali un trozo de papel para que se limpiara el líquido de su barriga.

-Gracias-dijeron los dos.

-Os veo en unos 5 meses, ¿vale? hasta entonces no tenéis por qué venir, siempre que no haya algún problema. Si tuviérais alguna duda o preocupación, yo estoy aquí siempre, no tengáis problema en pasaros, ¿vale?-Lali asintió, agradecida.

-Y... ¿tiene que guardar reposo doctor? ¿o tomar algunas medidas?-preguntó Peter

-Por ahora no tiene que guardar ningún reposo, puede continuar con su vida normal. Sin hacer grandísimos esfuerzos ni cosas que puedan dañar al bebé, está claro. Y que se alimente bien y beba mucha agua, esas son mis únicas recomendaciones-Peter y Lali agradecieron infinitas veces al doctor, ya que había sido muy amable con ellos. 

Estaban felices, en un sueño, con ganas de contarlo a todos sus amigos y familiares. Ninguno de los dos podían dejar de sonreír, llegaron a casa con una alegría inmensa, todavía no podían creérselo. Irradiaban felicidad. 

La alegría afirma la vida, ilumina tu alma, convierte tus ojos en faros. La alegría mantiene vivo el niño que llevas dentro. La alegría te ayuda a ver la vida como un juego, diluye la espesura del drama. Vuelve nuestra vida más ligera. Hace que la desesperación sea menos desesperante, que el dolor duele menos y que el placer sea más placentero. La alegría nos hermana, nos reúne, nos anima a compartir. La alegría te da paz. La alegría nos predispone al amor, a la pasión, a la aventura. La alegría baja las defensas inútiles y mejora el sistema inmune, y lo mejor: es gratis. 
La puedes encontrar en un beso, en un bebé, en la música. La alegría es eso que dejas pasar buscando eso que te supone que te dará alegría. La alegría es el único virus bueno y muy contagioso. La alegría es una fe profunda en el futuro, es una puerta abierta a nuestro verdadero ser.

-Bueno... ¿y ahora qué?-preguntó Lali.

-No sé... ¿nos casamos?






miércoles, 18 de junio de 2014

Novela: "Amor Prohibido"


Perdón por no subir doble capítulo ayer como me pidieron, pero acabo de empezar a subir otra vez novela y me quiero esperar un poquito a ver si empiezan a firmar más personas, pero os prometo que en unos días subiré doble capítulo o haré un maratón por las que firman ¿vale? prometido. Gracias por las firmas:)

Capítulo 30


-¡Enhorabuena cariño, vas a ser mamá!-la abrazó su amiga. Lali se puso las manos sobre el rostro.

-Y todos estos días tuve en cuenta esa posibilidad, pero te juro que aún no caigo, no me lo creo todavía...

-¡Pues creételo porque en unos meses esta barriguita-puso su mano sobre la barriga de Lali-comenzará a crecer y también mi sobrinita o sobrinito!-las dos sonrieron al escuchar salir esas palabras de la boca de Euge- ¡Ey! ¿Estás contenta?

-No se...-se quedó pensativa-sí, claro que sí, estoy muy contenta. Voy a ser madre, y además con Peter como padre, eso es lo más maravilloso que puede pasarle a una mujer. 

-¿Pero...?-le preguntó su amiga que tanto la conocía y Lali esbozó una media sonrisa.

-Pero estoy muy asustada

-Eso es lo más normal La, todas las mamás primerizas estan asustadas, pero eso es bueno, significa que te preocupas por tu bebé. 

-Sí, pero ¿y si no soy una buena madre? o si no sé cuidarlo... cuando era más pequeña me dejaron una vez a cargo de Stefano, ¿sabes donde lo encontraron mis padres? en casa de los vecinos, ya no me dejaron más con él a solas-Euge se estaba aguantando la risa-mi instinto maternal se lo ha llevado otra mujer, enserio-no aguantó más y estalló de la risa.

-¡Lali! Eras muy pequeña cuando pasó lo de Stefano, has crecido mucho desde entonces. Todas llevamos nuestro instinto maternal dentro, aunque creamos que no, y eso sale cuando tienes un hijo. Es normal que al principio vayas un poco perdida, como todas las madres, pero irás aprendiendo poco a poco tontita. Todo va a ir bien-le apretó la mano-ya lo verás.

-Sí, supongo que sí-sonrió-me muero de ganas de contárselo a Peter.-Las dos sonrieron, guardaron todos los test y salieron del baño.

Pasaron la tarde organizando cosas, planificando y charlando sobre un futuro no tan lejano. Sobre las 9 de la noche, Euge se arregló y se fue a cenar con su novio. A las 9 y media tocaron al timbre. Lali fue a abrir, era Peter.

-Hola-se dieron un pico, como si fuera la primera que se veían en persona. Estaban los dos igual de nerviosos. Se sentaron en el sofá.

-Antes que nada-comenzó a hablar Peter- ¿me puedes contar qué demonios ha pasado con el director? he ido a su despacho y me ha dicho que no me preocupe por nada, que voy a terminar mis estudios. ¿Te han despedido?

-Sí-se detuvo-yo... he ido a hablar con él esta mañana, no podía soportar la incertidumbre de saber si continuaba con trabajo o no, no podía aguantar hasta la tarde. Casi no he pegado ojo por todo esto, me imagino que igual que tú y necesitaba saberlo ya. Así que he estado hablando con él y los dos hemos llegado a la misma conclusión; que con tu esfuerzo y tus calificaciones sería muy injusto expulsarte por esto. Y lógicamente, yo no podía seguir trabajando ahí, ya que perjudicaría a la universidad y a su imagen como director, ya sabes... los dos ahí no podíamos seguir, así que... me ha despedido y... muerto el perro, se terminó la rabia.

-Lo siento mucho mi amor, enserio, se que te gustaba mucho tu trabajo y siento que lo hayas perdido por mí-agachó la mirada.

-Pit, mírame-la miró-los dos sabíamos que esto iba a llegar en algún momento, era lo que tenía que pasar. Nadie ha tenido la culpa, las cosas han pasado así y ya está, es algo que no se ha podido evitar. Encontraré otro trabajo, no importa. Además, ha intervenido para que no se refleje en mi currículum o expediente, ni en mis datos personales que me ha expulsado, sino como que yo he dimitido por algún motivo, así que, dentro de lo que cabe estoy contenta. Y lo importante es que tú puedas continuar-Peter le agarró la cara.

-Gracias por ser tan buena conmigo-le dio un beso.

-Y... bueno, tengo que contarte otra cosa-Peter se puso tenso.

-¿Hay novedades?-Lali asintió y se llevó las manos a la barriga.

-Vamos a ser papás-anunció con una enorme sonrisa.

martes, 17 de junio de 2014

Novela: "Amor Prohibido"

Capítulo 29



-¡La, espera, no vayas tan deprisa! ¡Lali!-se detuvo Euge, ahora seria al ver que no paraba. Lali al fin se detuvo, y dio la vuelta hacia su amiga.

-Euge, ¿esque no lo entiendes? ¡estamos las dos en el paro! ¿cómo demonios vamos a pagar el piso ahora? ¿qué vamos a hacer? si voy a ser madre no me puedo gastar mis ahorros pagando el piso ¡necesito el dinero!

-En primer lugar, ¿puedes tranquilizarte? podría haber ido muchísimo peor, podrían haber expulsado a Peter, y sin embargo él va a terminar su carrera. Tú y yo encontraremos otro trabajo, tenemos tiempo. Y tienes a tu familia, nunca vas a quedarte en la calle, y me tienes a mí-Lali la miró a la cara por primera vez, con los ojos brillosos-todo va a salir bien-abrazó a su amiga, que como siempre, la había conseguido calmar.-¿Y ahora sabes lo que vamos a hacer? nos vamos tú y yo a buscar trabajo, a tirar currículums, a hacer entrevistas... lo que haga falta, ¿vale?

Y así lo hicieron, estuvieron horas recorriendo todo Forks, repartiendo sus currículums y dejando sus números de teléfono en aquellos lugares donde habían vacantes de trabajo. A las tres de la tarde llegaron a casa, muertas de cansancio y cargadas de bolsas. Las dos se tiraron al sofá.

-¿Ves lo bueno que tiene no trabajar? esta tarde no tenemos que movernos de casa y podemos descansar todo lo que queramos-bromeó Euge para hacer sonreír a su amiga.

-La verdad es que estoy agotada.

-Mira, hacemos una cosa, vamos a la habitación, nos ponemos cómodas, bajamos a hacer la comida y después te haces los test tranquilamente, ¿te parece?-Lali respiró hondo

-De acuerdo.

Ambas se pusieron el pijama, calzado cómodo para ir por casa y se pusieron a cocinar juntas pasta con salsa a la carbonara. Se sentaron a comer, entre charlas y risas. Euge hizo que Lali se olvidara de todos los problemas por unas horas.

-¿Has hablado con Peter hoy?-preguntó Euge mientras saboreaba la pasta. 

-Sólo esta mañana, para darle los buenos días antes de irse al trabajo. No he vuelto a tocar el móvil en todo el día, voy a ver si me ha hablado-Lali se levantó de la mesa y se acercó a su bolso para coger el móvil. Tenía varios mensajes de Peter, entre ellos preguntándole si había novedades sobre el tema del embarazo. 

-¿Te ha hablado?

-Sí, quiere saber como va todo, si estoy bien y si hay novedades y eso... le diré que venga hoy y le cuento todo. Perdón por no contestar antes, he estado ocupada haciendo cosas con Euge, ¿vienes cuando termines las clases a cenar a mi casa?- Le envió y no tardó ni dos minutos en recibir una respuesta por su parte.

-Allí estaré mi amor. Pero no nos vemos antes? hemos quedado con el director para hablar... lo recuerdas no???

-Yo no voy, ya he hablado con él, tranquilo, a la noche te cuento. Besito-Lali dejó el móvil y volvió a la mesa con Euge hasta que terminaron de comer.

-Anda, ves a hacerte eso y a salir ya de dudas, yo quito la mesa ¿si?-Lali miró a Euge y asintió con miedo. Agarró los cuatro test que le había comprado la exagerada de su amiga y se fue al baño del piso de arriba. Euge quitó toda la mesa y puso el lavaplatos. Cuando terminó, subió a ver que tal iba su amiga. Tocó a la puerta un par de veces.

-¿Se puede?-preguntó antes de pasar y entonces entró. Lali se encontraba sentada en la taza del váter, con la mirada en un punto fijo y los test encima de la pila.-¿Y? ¿Te los has hecho ya?-Lali asintió

-Los cuatro. Pero no he podido mirarlos.

Euge sin dudar ni un segundo fue directa a los cuatro test que había sobre la pila y comenzó a mirarlos uno por uno. Cuando ya había mirado y repasado los cuatro, se dirigió a Lali.

-En los cuatro sale lo mismo. Estás embarazada, de dos semanas. 

lunes, 16 de junio de 2014

Novela: "Amor Prohibido"

Más de un mes sin subir novela, lo sé. Algunas me habéis preguntado si iba a seguir subiendo y sí, pero os prometo que no he podido sacar tiempo. Pensaba continuar subiendo en época de exámenes pero me he visto muy agobiada y no he podido, ya que no tengo los capítulos escritos sino que voy al día, y para colmo hoy tenía pensado subiros tres y cuando ya los tenía escritos se me han borrado, y he tenido que empezar de nuevo :(. Bueno, por fin he terminado de trabajos y de exámenes y ahora tengo todo el tiempo del mundo. Subiré todos los días a no ser que surja algún problema, aquí os dejo el capítulo y espero que sepáis entenderme aunque esta vez se que no tengo perdón....  lo siento y gracias por las que siguen ahí siempre, aún cuando tardo tanto en subir. Un beso chiquis!!!


Capítulo 28






Lali llegó tarde a casa y le contó todo lo sucedido a su mejor amiga, que la esperaba despierta, algo preocupada. Euge la intentó tranquilizar, y lo consiguió, como siempre hacía. Al día siguiente se levantaron temprano, Lali tenía que hacer un par de cosas y pidió a Euge que la acompañara. Almorzaron juntas, hicieron la compra y fueron a la farmacia a comprar el famoso "predictor", Lali sólo quería uno pero Euge compró tres más para asegurarse. 



-Bueno, ¿queda alguna cosa más para hacer? - preguntó Euge mientras salían de una panadería. 



-Quiero ir a un último lugar, ¿me acompañas?



-Claro, ¿a dónde?



-A la universidad-su amiga frunció el ceño.



-¿Qué vas a hacer La?



-Zanjar este tema ya, yo no puedo aguantar hasta esta tarde para saber si me despiden y si a Peter lo expulsan. Voy a hablar con el director.



Lali tocó a la puerta del despacho del director, y dijo a Euge que la esperara abajo, en la entrada. 



-Adelante- musitó el director con su ronca voz- Espósito, si no recuerdo mal habíamos quedado esta tarde junto con Lanzani. 



-Así es, pero he querido venir ya a hablar contigo y no perder el tiempo ni hacérselo perder a usted. 



-Valoro mucho tu sinceridad-hubo un breve silencio- ¿Sabes Mariana? en el momento en el que leí tu brillante currículum me quedé asombrado por las cosas que has logrado siendo tan joven,



-Yo... no quiero que piense algo que no es. Yo a Peter lo conocía de antes de entrar a trabajar a la universidad, lo conocí cuando llegué nueva a Forks. Era el único amigo que tenía aquí y no tenía ni idea que iba a ser su profesora, y él tampoco. Nos enteramos después y no quisimos decir nada por si se pensaban cosas que no eran, pero parece que nos equivocamos- el director se quedó observando a Lali fijamente por unos segundos, dubitativo. 



-No creo que seas una mala persona Mariana, y tampoco creo que tú seas así, pero como comprenderás tanto compañeros tuyos como de Lanzani os han visto varias veces, y eso no da una buena imagen a la universidad, es poco profesional. 



-Lo sé, y lo entiendo... pero sólo quiero decirle que como bien sabemos los dos, Juan Pedro tiene muy buenas calificaciones, y que se ha esforzado mucho por llegar hasta aquí. No le pido que no me despida, porque se que es su trabajo, pero creo que él no merece que lo expulsen, le ha costado mucho llegar hasta aquí y él no ha hecho nada malo. Además, si me despiden a mí se acabó el problema, ¿no?



-Está bien, tienes parte de razón en lo que has dicho. A Peter no vamos a expulsarlo, como tú dices se ha esforzado mucho y está en el último año, no sería justo para nadie-Lali suspiró aliviada- En cuanto a tí... me temo que por el bien de la universidad, no me queda más remedio que expulsarte, no sería correcto que continuaras impartiendo clases aquí teniendo una relación con un alumno, lo siento-Lali agachó la mirada, con los ojos llorosos, evitando no llorar allí delante.-lo bueno de todo esto es que esto no va afectar a tu currículum ni a tu historial profesional, vamos a hacer esto como si tú hubieras renunciado por algún motivo personal, de esa manera no saldrás perjudicada en ese aspecto, y no se reflejará en ningún lugar que te han despedido-Lali levantó la mirada.



-¿Puede hacer eso?



-No debo, pero puedo-esbozó una media sonrisa y esa fue la primera vez que Lali vio sonreír a ese hombre de semblante tan serio. Lali asintió. Realizaron el papeleo necesario para llevar a cabo la supuesta "renuncia" por parte de Lali. 



-Muchísimas gracias- la habían despedido aunque tenía la esperanza de que no lo hicieran, pero él no tenía por que haber hecho eso por ella ni preocuparse por la imagen que ella diera. El director había mostrado a Lali su lado más humano, ese lado que la gente desconocía.