NOVELA: "SER DIFERENTE"
CAPÍTULO 2: "Poco a poco"
Comimos con mi amiga y pasamos una muy buena tarde juntas entre risas. A la noche decidimos llamar a Gastón para que viniera a cenar a mi casa y pasar una linda noche los tres juntos, ya que ya se por tema de trabajo o personal hacia bastante que no estábamos un buen rato los tres juntos sin nadie más.
Tocaron al timbre y cuando abrí Gastón se lanzó a mis brazos.
-¿Como está la más linda?
-Gracias, yo soy un perchero-le recriminó mi amiga, que se encontraba poco detrás de mí. Los tres reímos y Gas fue a abrazar a Cande.
-Chicos, antes que nada, ¿Qué les parece si pedimos pizzas?
-Perfecto-dijeron al unisono
Charlamos, Gas nos puso al día, y estuve tan agusto que ya no recordaba la última vez que me sentí tan bien. Los amaba, los amaba con toda mi alma. Eran los mejores amigos del mundo, los conozco desde la secundaria y siempre me aceptaron como soy y me apoyaron. No fue fácil encontrar unos amigos así, pero al final los encontré, y los mejores. Candela le contó mi decisión de volver a ser como antes, por lo que nuestro amigo se alegró como el que más.
-¿Qué les parece a mis chicas si para celebrarlo salimos un rato esta noche?-nos propuso el rubio
-Sí, sí, buenísimo
-No sé chicos, ya sé que voy a volver a disfrutar como antes y todo eso... pero poco a poco, no tengo muchas ganas de joda...
-Dale La, ¡copate! hace muchísimo que no salimos juntos, además si te cansas nos volvemos prontito, cuando vos digas te lo prometo- me dijo Can
-Sí, daaale, porfi porfi porfi- y los dos esperaban una respuesta mientras me observaban con cara de perrito abandonado
-Bufé- Bueno, está bien, pero un ratito¿si?-No me dio tiempo a terminar de pronunciar esas palabras que ya se encontraban encima de mí abrazándome.
Se fueron a sus respectivas casas para arreglarse y vernos en un rato. Yo me fuí hacia mi habitación a escoger que ropa ponerme: Un vestido negro, ajustado por arriba pero más suelto por debajo de la cintura. De calzado, unos tacones beis a conjunto con mi cartera.
Me dejé el pelo caer y simplemente me ondulé las puntas. No me gusta maquillarme demasiado, así que me puse algo de base, me enrojecí un poco las mejillas y me delinee los ojos para que destacaran. Cuando terminé de todo, le envié un whatssap a Candela diciéndole que estaba lista, y ella me respondió que en unos 5 minutos estaría en la puerta con su papá y que Gas nos esperaba allá. Iba a salir por la puerta y me lo encontré de nuevo. Comenzaba a pensar que elegía los momentos en que no podía hablar, lo ignoré, ya que si se había esperado tanto tiempo podría esperar unas horas. Una vez más, respiré hondo, cogí mi abrigo y salí de mi casa dispuesta a pasármelo bien, realmente mentalizada de que TENÍA que pasármelo bien y que nada podía amargarme esa noche.
