sábado, 29 de marzo de 2014

Novela: "Amor prohibido"




Capítulo 24

-¡Hola!-dijo Lali entrando por la puerta de su casa, y en dos minutos Euge ya estaba bajando por las escaleras.

-¡Hola La!-la abrazó- ¿Cómo fue?-Peter entró con las maletas de Lali por la puerta.

-Buenas-dijo descargando las bolsas.

-Hola Pit-le sonrió Euge y le besó la mejilla.

-¿Y Pablo?

-Acaba de irse, hace cinco minutos. Pensaba que érais él que se le había olvidado algo. Me está preparando una sorpresa-dijo dando pequeños saltitos.

-Pablo es muy romántico cuando quiere-sonrió Peter y Euge lo miró mal.

-¿Es así con todas las chicas con las que sale?-Peter miró a Lali, con cara de haberla cagado y Lali puso los ojos en blanco.

-No ha querido decir eso celosa. Tienes un novio muy tierno que te cuida y te quiere, no pienses en eso.

-Bueno, ¿cómo ha ido entonces?

-Muy bien, Pit se ganó a la familia entera-sonrió Lali mirándolo y él le devolvió la sonrisa, abrazándola por detrás.

-Amor, yo me voy a ir a casa a avisar a papá que he llegado ¿vale? 

-Claro, ve. Después hablamos-le dio un largo pico y se fue.

-Os veis tan monos....-se mordió el labio su amiga.-¿Y? ¡cuéntame!

-Nada, fue muy bien-dijo agarrando sus bolsas.

-Nada, fue muy bien-imitó a su amiga con voz de burla.-¡Lali! ¡Despierta! ¡Peter ha pasado el fin de semana con tu familia! ¿y sólo fue muy bien?-Lali rió.

-Vimos a Benjamín.-Euge se sentó en el sofá.

-¿Enserio? ¿Y que pasó?

-Nada, ese es el problema. No pasó nada. Es decir, se puso chulo y intentó enfadarnos tanto a Peter como a mí. Pero... no sé, no me fío. Tú sabes tan bien como yo como es él, es raro que se fuera sin más, no sé-se agarró la cabeza.

-Ey, alomejor ha cambiado. No lo sabes.

-Créeme, no ha cambiado. 

-Bueno, entonces tal vez sólo quería molestar, pero no pretendía nada más y tú estás aquí comiéndote la cabeza por nada.

-Sí, no quiero pensarlo-negó con la cabeza- ¿Tú que tal has pasado el finde?

-Ay... genial amiga. Me estoy enamorando mucho-dijo mientras se acostaba en el sofá, sonriendo.-me hace muy feliz este chico. Pasamos el finde aquí, juntos, haciendo el amor y dándonos mimos. Fue maravilloso.

-Me alegro tanto tanto, lo sabes-la abrazó.

-Lo sé-sonrió ella.

-Me voy a hacer cosas, mañana tengo clase y no tengo nada preparado, y después seguimos charlando-dijo mientras subía las escaleras.

-¡Yuuuuju, vuelve el amor clandestino!-gritó Euge mientras alzaba los brazos, y Lali comenzó a reír. Estaba tan loca.

Al día siguiente, Lali salió de su casa, rumbo a la universidad, sus planes mentales cambiaron cuando vio a Peter fuera, esperándola, apoyado en su coche, con su apretada camisa que le marcaba los músculos, sus gafas de sol y su sonrisa de chico tierno.

-Hola, ¿qué haces aquí?-ella no pudo reprimir la sonrisa.

-Vengo a recoger a la princesa-sonrió.

-Nos pueden ver-dijo casi en un susurro y Peter miró para todos los lados.

-Pase a dentro, y relájese-Lali sin pensarlo dos veces subió a su coche, no podía negarse. Antes de arrancar, Peter fue directo a la boca de Lali, sumergiendo su lengua en la boca de ella. Esos besos que le daba... a ella siempre la dejaban con ganas de más.-Estaba pensando... podríamos saltarnos hoy la universidad-dijo mientras arrancaba el coche, y sonreía pícaro, ella también sonrió.

-Sabes que me encantaría, pero no podemos hacer eso. Ni tú ni yo, ni si quiera deberías pensarlo.

-Bueno, esque tengo muchas ganas de estar contigo-le agarró la mano, mientras con la otra sujetaba el volante.-Y no soporto tenerte delante mía en clase y no poder tocarte, ni besarte...

-A mí también me cuesta, pero ya lo hablamos, si queremos seguir con esto hay que aguantar Pit, para mí tampoco es fácil-se acercó a él y le depositó un beso en la mejilla- ¿Sabes que he estado pensando?-Peter la escuchaba, pero no apartaba los ojos de la carretera-tú ya has conocido a mi familia, a mí también me gustaría conocer a tu padre.-Peter se puso tenso.-¿Qué?

-Nada.-respondió seco.

-¿Nada?

-Nada-dijo y entonces un coche les pasó por delante a toda velocidad, tocando la bocina y rozándoles. Por poco no provocaron un accidente.

-¡Peter! ¡¿En qué demonios estás pensando?!

-¡No quiero que conozcas a mi padre, ¿Vale?!-Lali se quedó atónita. No sólo porque no esperaba esa respuesta, sino, por la manera en que le contestó. Lali se sintió muy molesta por que le hablara así.

-Para el coche-Peter la miró confuso-¡Que pares el coche Peter!-y él paró.-Yo te he presentado a mi familia, tampoco ha sido fácil para mí, todo esto ha pasado en muy poco tiempo y... ¡dios! pensaba que íbamos enserio, pensaba que esta relación era ya seria como para conocer a nuestras familias, pero parece que me he equivocado, que no tenemos los mismos intereses-ella abrió la puerta del coche para salirse y Peter la cogió del brazo

-Lali, escúchame...

-No, no quiero hablar. Déjame sola-se soltó bruscamente y se fue caminando.

-¡Mierda!-pegó Peter con rabia al volante, las cosas no eran como Lali pensaba, y él sabía que la había cagado.

domingo, 16 de marzo de 2014

Novela: "Amor prohibido"

Lo sé, no tengo ni cara ni perdón :( a parte de lo ocupada que estoy, últimamente estoy teniendo unos pequeños problemas, lo siento tantisimo por no poder subir más. Como ya os dije, tengo preparada y programada la próxima novela para que no me suceda lo mismo. Lo siento de nuevo y gracias por la paciencia!




Capítulo 23

-Sí, espero que seas igual de bueno con mi hija-entró su padre y Peter tragó saliva al oír aquella advertencia.-vamos a hablar ahora que estamos todos los hombres reunidos...

-Papá...-dijeron Agus y Stefano


-Mira, Peter, me has caído muy bien desde el primer momento, pero yo también soy hombre y me di cuenta desde el primer momento de como mirabas a mi hija y no se muy bien tus intenciones...


-Papá-intervino Agus de nuevo-basta. Nosotros sabes que con estos temas también nos preocupamos mucho por Lali, pero Peter es un buen chico. Lo ha demostrado cuidando de Lali en Forks. 



-Pienso igual, y tú sabes que para eso nosotros  nos fijamos mucho y echamos un ojo a los que se le arriman-añadió Stefano.



-Chicos, yo no tengo malas intenciones con ella, de verdad. Yo la quiero, y no voy a hacerle daño.



-Más te vale, porque sino sabes que en esta familia te cortan las pelotas-añadió Stefano y rieron.



-Espero que sea así de verdad, Peter, y si así es, bienvenido a la familia-dijo el padre, le tendió la mano y se dieron un pequeño "apretón", para después dejar la habitación.



-Discúlpalo Peter, es muy cuida con mi hermana-musitó Agus-Es su única hija y...



-Lo sé, y lo entiendo. Es lo que todo padre haría.



-¿Qué, revancha?-dijo Stefano y los tres sonrieron.



-Por supuesto-afirmó Peter y continuaron jugando, hasta que Lali subió y tocó a la puerta.-Hola-la miró Peter, sonriendo.



-Bueno, veo que estás muy bien sin mí, eh?- sonrió al ver a los tres jugando-Nadie diría que os habéis conocido hoy. ¿Te apetece que vayamos a dar una vuelta y te muestro el barrio?



-Mucho-sonrió.



-¿Chicos queréis venir?



-¡Sí!-dijo Stefano acercándose a ellos.



-No-lo paró Agustín- dejémosles un poco de intimidad Yeyo, mañana damos un paseo todos-le guiñó un ojo a Lali y ella sonrió. Echaba de menos estar con su familia, pero la verdad era que le apetecía un poco de intimidad con Peter.



-Está bien, pero si en venir me prometéis una partida al trivial todos, también con papá y mamá, como antes.



-Hecho-dijeron todos y Lali y Peter salieron a dar una vuelta. Iban agarrados de la mano, paseando por la calle, sin nada ni nadie que pudiera molestarles.



-Me hace tanta ilusión que estés aquí-miró a Peter y él le dio un pico.



-A mí también estar, contigo y con tu familia.



-Peter-lo paró Lali-te quiero.



-Te amo, Lali-se miraron a los ojos-Eres genial. Creo que nada podría ir mejor, y nada podría estropear este día-y fue como si las palabras de Peter hubieran sido mágicas, y si pudiera estropearse su día.



-No puede ser... mira quien tenemos aquí-se acercó a ellos y sonrió-Lalita con un chico, ¿quién me iba a decir que ibas a ser tan rapidita?-Peter la miró sin entender demasiado.-¿No me vas a saludar?-


-Hola-dijo firme. Lali no podía dejar de mirarlo. Era una mezcla de miedo, tristeza, repugnancia, recuerdos...


-Lali, cariño, ¿él es tu ex?-preguntó Peter, sin saber muy bien que hacer, y Lali asintió.


-Uh, su ex, que mal suena eso ¿verdad Lalita? no sabía que habías vuelto, ¿os quedáis por mucho tiempo?-se arrimó un poco más y Peter se puso por delante-epa-Lali agarró a Peter y lo tiró para atrás.

-Pit, déjalo, vámonos por favor. Y tú déjame en paz.-los dos comenzaron a caminar y Benjamín los siguió.

-¡Eh! ¡no te recordaba tan maleducada!-la paró del brazo y Peter se interpuso, haciendo que le soltara el brazo.

-¡Te ha dicho que la dejes!-un par de personas se pararon a mirar la situación y Benjamín rápidamente se alejó de ellos dos.

-¿Qué pasa, macho? ¿Tienes miedo que continúe enamorada de mí?-Lali sonrió irónicamente, Peter no apartaba la mirada de él, advirtiéndole.-espero que nos volvamos a ver. Estás preciosa-le guiñó un ojo, miro a su alrededor y se marchó. Peter le agarró la cara a Lali con las dos manos y la miró a los ojos.

-¿Estás bien?-ella asintió, un poco nerviosa.

-No quería que esto pasara-negó con la cabeza-quería que todo fuera bien...

-Ey, todo va bien. Tan sólo ha querido venir a molestar, a mí no me importa, mírame, estoy bien-estaba algo inquieta.

-Tú no sabes como es, cuando se enfada no para hasta conseguir lo que quiere. No parará de molestar. Le ha enfadado mucho verme con otra persona y... no sé, me da miedo.

-Pero mañana por la tarde estaremos en Forks, tú y yo. No podrá molestarnos.

-Sí pero, cuando vuelva a ver a mi familia o... algún día volveré a vivir aquí ¿no? No tengo pensado quedarme en Forks por siempre.

-Bueno, entonces tendré que venir en todos tus viajes contigo, para que ni él ni ningún otro chico se te acerquen-le sonrió, intentando animarla, y ella esbozó una leve sonrisa y juntó sus labios con los de él.

Como prometieron, al volver a casa jugaron al trivial en familia, y Lali se olvidó de todo lo demás. Peter, por su parte, fue entrando en más confianza con la familia, sobre todo con Stefano y Agustín. Lali más tarde habló con ellos dos, ya que pensaba que les debía alguna explicación, les contó la razón por la que se había marchado de Houston, evitando la parte de cómo la trató Benjamín, ya que sabía que si se lo contaba a alguien de su familia las cosas no quedarían así, y ella lo único que quería era no volver a verlo ni saber nada de él. Esa charla con sus hermanos para Lali fue como recuperar la relación que tenían antes, no era mala, pero sí distinta. Pasaron una buena tarde y noche, hasta que al fin se fueron a dormir. Peter durmió en la habitación de Agus, con una cama desplegable que tenía, ya que el padre de la familia no consideraba "apropiado" que durmieran juntos.

Al día siguiente, fueron todos juntos a dar un paseo antes de comer, y Lali sintió un gran alivio de no encontrarse a Benjamín. Más tarde, toda la familia, incluída la abuela fueron a acompañarlos al aeropuerto y a despedirse de ellos. Era la hora de volver a Forks, de volver a la rutina, de volver a la clandestinidad, pero también de volver a estar totalmente juntos.

sábado, 1 de marzo de 2014

Novela: "Amor prohibido"


Capítulo 22


Lali se quedó observando a su familia, y pensando como sacar el tema de Peter de manera natural.


-La verdad es que si antes de que viniera Euge no hubiera estado Peter no se qué habría hecho, él me ayudó bastante a acoplarme allí-Peter la miró, sonriendo, pero los demás se quedaron mirándola algo desconcertados.


-La verdad Peter, gracias por haberla ayudado desde el principio, has sido muy amable con ella- sonrió su madre.



-Pues...-musitó ella moviendo las manos, nerviosa- ¿recordáis cuando os conté que lo conocí en su restaurante? es verdad que lo conocí allí, pero hay una cosa que no sabéis-todos la miraron, esperando la noticia, pero no esperaban esa-Peter es alumno mío, pero cuando nos conocimos ni él ni yo lo sabíamos.-La familia estuvo en silencio por unos segundos. Hasta que la anciana de la familia rompió ese silencio.



-Bueno, si ninguno de los dos lo sabíais no tenéis culpa. A veces el afecto entre dos personas crece aunque quieras evitarlo, y sin poder controlarlo.



-¿Y cuando os enterasteis que pasó? ¡Menuda faena, él único amigo que haces y es tu alumno! -preguntó el hermano pequeño.



-Que ya era tarde para poder romper esa relación-sonrió su madre y Peter y Lali la miraron algo tímidos.-¿Tenéis algo más para contar chicos?



-Me parece que sí-dijeron su padre y su hermano mayor al unísono. Lali agarró la mano a Peter por debajo de la mesa, y puso ambas encima, mostrándolas a todos y él la miró sorprendido.



-Ya que estamos aquí, aprovechemos-musitó ella susurrándole a Peter-familia, Peter y yo estamos juntos. Y sé que no es lo correcto papá, que yo esté con un alumno, pero como ha dicho mamá es algo que no pudimos controlar, sabes que soy responsable y en clase nos limitamos a ser alumno y profesora, hay una simple relación cordial.



-Yo sólo digo que pueden despedirte y tomarte como una persona poco responsable y poco profesional, y eso es una mancha para tu currículum. Y a tí pueden echarte.-se dirigió a Peter. La madre de Lali lo miró mal y él agachó la vista- pero me alegro. 



-Bienvenido a la familia cuñado-dijo Agus.



-Por nuestro cuñado-dijo ahora Stefano, proponiendo un brindis. 



-Me alegro por vosotros chicos-dijo su madre y se arrimó a abrazarlos.



-Sí, yo también me alegro mi vida-le agarró su abuela la mano a Lali, con su peculiar sonrisa. Tenían una relación muy estrecha y sincera. 



La comida transcurrió con tranquilidad, charlando. Tanto Peter como Lali sentían que se habían quitado un gran peso de encima. Cuando terminaron, ella le enseñó la casa, dejaron las maletas en la habitación de ella y bajaron al comedor a descansar.


-Eh, Peter, ¿echamos partida de play o ya te has cagado?-preguntó Agustín

-¡Vamos!-dijo y los dos sonrieron. Stefano se apuntó y fue tras ellos. Lali se sentó en el sofá, cansada, y suspiró. Se quedó con su madre y su abuela. Ellas la miraban.

-Tenía muchas ganas de verte ya-dijo su madre abrazándola.

-Y yo a vosotros-sonrió, de nuevo estaba en casa.- Mamá... ¿qué os parece que esté con Peter? yo sé que no está bien, y me ha costado dar el paso, pero...

-No, no está bien. Pero yo sé que tú no eres de enamorarte o tener algo con un alumno. Nosotros te conocemos mi amor, y sabemos que eres profesional y responsable, pero tu padre te lo dice por tu bien, porque no todos te conocen como nosotros, y si os descubren puede perjudicarte en tu trabajo y a él en su carrera.

-¿Y qué debo hacer? ¿Dejo el trabajo?

-Claro que no-se adelantó a decir su abuela-tú no debes dejar nada. A veces el amor surge y no puede evitarse. A veces deben hacerse locuras por amor. Y a veces las cosas suceden por algo-le guiñó un ojo y Lali sonrió.

-¿Te trata bien, te cuida?-preguntó ahora su madre y Lali asintió.-entonces eso es lo único que me importa.-Lali abrazó a su madre y a su abuela.

-Os amo.

-Lali, no me importa la razón por la que te fuiste. Se que fue por Benjamín, no sé que pasó entre vosotros pero sé que él es la razón. Respeto que no quieras volver a hablar de eso, ni sacar el tema. Ahora me he dado cuenta que no me hace falta saberlomientras estés feliz, y ahora te veo feliz así que no hay más que hablar.

Mientras tanto en el piso de arriba...

-¡No lo puedo creer, nos ha ganado a los dos!-gritó Stefano mientras Peter sonreía victorioso.

-Realmente eres bueno, eh. Tengo que decir que me has sorprendido-rió Agustín.

-Sí, espero que seas igual de bueno con mi hija-entró su padre, y Peter tragó saliva al oír aquella advertencia- vamos a hablar ahora que estamos todos los hombres reunidos...