lunes, 27 de enero de 2014

Novela: "Amor prohibido"

Chicas siento la tardanza pero el viernes acabé exámenes y me tomé el fin de semana libre para mis cosas, que hacía tiempo no lo hacía jajaja
Besos!




Capítulo 14

Los días iban pasando, y la relación Peter-Lali seguía igual, ella lo trataba como a cualquier otro alumno, era simpática con él, pero cordial, como cualquier profesora con sus alumnos. Al contrario que Pablo y Euge, que se veían prácticamente todos los días, y cada día que pasaba estaban mejor. Habían llegado a tener en poco tiempo una gran confianza, y todavía no estaban juntos aunque llevaran vida de novios, pero los dos tenían en mente esa opción. Cuando Lali llegó a clase, se percató enseguida de una cosa: Peter no estaba allí. Estuvo toda la clase pensando si estaría enfermo, o si simplemente no querría ir, todavía no sabía como se tomaba él de enserio sus estudios. Cuando terminó la clase, se acercó a Pablo.

-Dile a tu amigo que vaya con cuidado con las faltas, en mi clase sólo faltó una vez pero no sé en las demás. No me gustaría que suspendiera por eso.

-Lali, Peter nunca falta a clase, y desde que yo tengo uso de memoria nunca ha faltado. Hoy es la primera vez, si no ha venido tiene que tener una buena razón.

-¿Y tú no la sabes? Eres su mejor amigo

-Claro que la sé

-¿Y? Dime entonces

-Eso es cosa suya, cuando vuelva él si quiere que te lo explique-Pablo no dijo nada más y se fue. Lali estaba segura de que estaba resentido con ella o le tenía cierta rabia, Euge siempre le había dicho lo bromista, simpático y divertido que era Pablo, y cada vez que Lali hablaba con él sentía todo lo contrario. Seguramente sería por el tema de Peter, pero no entendía por que se hacían tanto drama.

Cuando Lali salió de dar clase, fue a la máquina de cafés a comprarse un capuccino y entró a la sala de profesores.

-Sí, la verdad es muy raro, ¿Deberíamos llamar a su casa?-escuchó decir de uno de sus compañeros de trabajo, Enrique.

-Yo me esperaría a ver si mañana aparece, la situación en su casa como bien sabemos no es buena, y tal vez llamando le causamos más problemas-añadió Rosa.

-¿Qué ocurre?-preguntó Lali al ver a varios profesores reunidos, hablando.

-Oh, no es nada grave Lali, almenos eso pensamos-continuó Martín-lo que ocurre es que hoy me tocaba cuarto a primera hora, el grupo 8 concretamente, el que tú acabas de tener.

-Sí ¿y qué pasa?

-El alumno Juan Pedro Lanzani, no se si sabrás quien es- <<si yo te contara>> pensó Lali- aquí lo conocemos todos desde hace muchos años, y jamás faltó a ninguna clase. Es un muchacho muy estudioso y tiene muy buenas calificaciones además. Estamos pensando qué puede haber pasado para que no venga, y barajando la opción de llamar a su casa-Lali ahora sí que estaba preocupada.

-¿Y por qué no llamamos? Es lo que se suele hacer en estos casos, ¿no? Y personalmente considero que es lo mejor, para salir de dudas.

-Eso queríamos hacer, pero Juan Pedro sólo vive con su padre, viudo y con problemas con el alcohol. Digamos que es Peter el que cuida de él, más que al revés. Así que tal vez llamándolo solo le causaríamos más problemas-intervino ahora Rafael-compañeros yo tengo que marcharme, aquí acabé mi turno, mañana me informan de su decisión. Buenas tardes-cogió sus cosas y se marchó.

-Yo también terminé por hoy-dijo Lali, cogió su bolso y su chaqueta y abandonó la sala de profesores, acelerando el paso. Cuando subió al coche dejó todas sus cosas en el asiento del copiloto y arrancó. Se imaginaba tantas cosas que podían haberle pasado a Peter, que no quería ni pensarlas. Frenó el coche en seco, frente a la casa de Peter, se puso su chaqueta y bajó. Cuando llamó al timbre, sólo rezó por qué Peter estuviera ahí, si no lo encontraba en casa no sabría qué hacer, ni dónde buscar. Al verlo ahí, atendiendo la puerta, sintió un gran alivio y el nudo de su estómago se deshizo. No tenía mala cara, pero sí parecía algo desanimado o decaído.

-¿Qué haces aquí?-preguntó él al ver que Lali no decía nada.

-Ve-venía a asegurarme de que estabas bien, escuché a los profesores decir que tú nunca has faltado a clase. ¿Por qué no has venido?

-Asuntos personales.

-Peter, vamos, soy tu amiga

-¿Mi amiga?-Peter rió y Lali supo que eso tampoco era así.

-¿Puedo pasar?-hizo intención de entrar y él bloqueó la puerta.

-Será mejor que no, está mi padre-Lali no sabía qué decirle o qué no decirle. Aunque había visto a Peter no se había quedado más tranquila, ni había encontrado respuestas. No sabía qué hacer, pero sí sabía que no quería marcharse de ahí ni irse así.-Si me disculpas profesora, tengo que hacer muchas cosas. Gracias por preocuparte, adiós-cerró la puerta antes de que Lali pudiera decir nada. "Profesora", pensó, ni si quiera la llamó por su nombre.

Cuando Lali llegó a su casa estaba Euge todavía, lo cual le extrañó mucho.

-¡Hola amiga!

-Hola-medio-sonrió Lali-¿Hoy no has quedado con Pablo?

-Sí, me va a invitar a cenar-sonrió ampliamente Euge-en un rato me voy. ¿Me ayudas a arreglarme ahora después?

-Claro-dijo tirándose al sofá y Euge la notó más seria de lo normal.

-Ey, ¿qué ocurre?-Lali suspiró.

-Peter hoy no fue a clase, y estuve escuchando a mis compañeros decir que él jamás faltó. Fui a su casa por si le había ocurrido algo, me preocupé bastante, pero no me dijo nada, y tampoco entendí nada. Me quedé peor de lo que estaba-Euge miró para el otro lado y Lali se incorporó.

-¿Tú sabes por qué no vino no?-Euge la miró y volvió a apartar la mirada.

-¿Yo? Yo no-dijo y se levantó del sofá. Lali la siguió.

-¡Eugenia!

-Está bien...-dijo volteándose para mirarla- sí que lo se

-¿Por qué no me lo quieres decir?-se extrañó Lali- siempre me lo has contado todo.

-Porque es por tí, La, y le prometí a Pablo que no te lo diría. Peter no fue a clase por tí-por lo que Lali sabía, a Peter le gustaba bastante, ya que él le dijo que sintió cosas la noche que se acostaron, pero no se había hecho ni la mínima idea de que a él le afectaba estar con ella tanto, tanto para interponer a ella ante sus estudios, que siempre había sido lo que más le había importado, su principal objetivo.