martes, 15 de octubre de 2013

Capítulo 34



NOVELA: "SER DIFERENTE"
CAPÍTULO 34: "En familia"

La primera semana pasó rápido, Peter hacía que ningún día fuera aburrido, y mis amigos y familia venían bastante a visitarme. Faltaban pocos días para mi cumpleaños, Peter y yo estábamos en mi cama, después de haber echado una siesta.

-La, llamó mamá, quiere venir a verte. Llevan tiempo queriendo conocerte, y pensé que ahora que estás mejor... podrían venir.
-¿Posta?-sonreí-¡me muero por conocerlos yo también! Pero Pit... prefiero que vayamos nosotros. 
-Mejor que no salgas
-¡Peter! llevo una semana sin salir-dije algo enojada-algo de aire no me vendrá mal, no va a pasar nada, ¡quiero salir!
-Está bien, les avisaré que estaremos ahí para comer-puso los ojos en blanco y sonreí satisfecha.

Me duché y me dejé el pelo suelto, me puse unos jeans con una camiseta de punto algo ajustada y mis botines de ricky sarkany. Me perfumé un poco y bajé a donde Peter me estaba esperando.

-Mmm que linda-me abrazó al verme
-¿Crees que les gustaré así a tus papás? ¿O son más conservadores? ¿Me cambio?-Peter rió
-Vas a encantarles
-¿Cómo estás tan seguro?
-Porque los vas a enamorar como me enamoraste a mí-me sonrió y lo besé delicadamente
-Vamos-musité segura

Unos minutos más tarde nos presentamos delante de su casa, no era demasiado grande pero era moderna y muy linda. Cogí aire antes de entrar y puse mi mejor sonrisa cuando abrieron la puerta. Una mujer alta, rubia de ojos castaños y delgada me dedicó una amable sonrisa.

-Hola hermosa-me saludó cariñosamente-yo soy la mamá de Peter, ¿como estás?
-Hola, estoy mejor muchas gracias-le devolví la sonrisa
-Em hola... yo soy una estatua
-Ai pequeño mío-lo abrazó su madre-bueno, esque a vos te vi hace poquito y quería saber como estaba mi nuera-nos hizo señas para que pasáramos y entramos en la casa. Definitivamente era muy linda casa, estaba hermosa decorada. -¡Chicos dejen de ver el fútbol y vengan acá YA!-gritó Claudia enfatizando la última palabra.

Apareció un chico rubio, más alto que yo pero que se podía observar en su rostro granoso y en su cuerpo que todavía era un niño.

-Hola-me saludó
-Hola Lali-se acercó ahora el que supuse que era su padre, con pelo canoso, gafas y algo de panza.-¿Cómo va todo? Perdonanos que no nos arrimamos antes pero en esta casa somos fanáticos del futbol y está jugando el racing.
-¡¿Qué?! ¿¡Está jugando hoy?!-se unió mi novio al "fanatismo futbolero" y desaparecieron los hombres de la familia volviendo hacia el salón. Claudia rodó los ojos.
-Hombres. No se lo tengas en cuenta, suelen ser más sociables-reímos las dos-Vení deja el abrigo por acá. Vamos a la cocina si quieres-su característica sonrisa continuaba en su rostro.
-¿A qué te ayudo?-le pregunté remangándome las mangas de mi camiseta.
-Mmm... si quieres ves haciendo una ensalada. ¿Te gusta? acá yo soy la única que como
-Bueno, ahora seremos dos-le sonreí
-Perdoname por esto Lali, tendría que tener hecha la comida pero vinieron demasiado pronto.
-No te hagas problema, te entiendo, además así te puedo ayudar yo. Por lo que veo hoy ellos no estaban muy por la labor-dije señalando a los chicos con la cabeza y rió.
-¿Y cómo va todo Lali? Eras odontóloga me dijo Peter ¿no es así?
-Así es, la verdad esque con esto del ataque llevo casi dos semanas sin laburar, el doctor me dijo que durante las primeras semanas no sufriera ningún tipo de estrés, yo quise seguir yendo pero entre mi madre y Peter... no tuve elección
-Y me parece bien que no te dejaran, tienes que hacer caso al doctor por favor. Y espero que mi hijo esté cuidándote como debe.
-La verdad es que sí, no me puedo quejar. Me trata como a una reina-sonreí
-Te quiere mucho, créeme-yo no pude evitar sonreír. Hablar con la madre de Peter era hablar como con cualquier amiga de toda la vida.

Su madre y yo estuvimos hablando un rato más, me contó sobre su trabajo, el de su marido y lo que estudiaba su hijo menor. También estuvo contándome algunas anécdotas sobre Peter o la familia, fue un lindo rato. Más tarde comimos todos juntos y su padre se interesó bastante por mí, su hermano estaba más tímido conmigo, aunque a la hora de hablar de fútbol o cualquier otro tema de ellos no callaba. La comida pasó entre risas, y en ningún momento me sentí incómoda ni nerviosa. Me sentía en familia.
Cuando terminamos de comer ayudé a su madre a limpiar todo, y mientras los chicos charlaban de sus cosas Claudia me enseñaba fotos de Peter de pequeño.

-¡Mamá!-le gritó avergonzado al darse cuenta de lo que estaba haciendo
-¡Qué gordo que eras!-estallé en una carcajada-¡y rubio!-me enseñó una foto en la que salía sin ropa y Peter hizo una mueca.
-¡Mamá enserio, me estás avergonzando!
-Eras hermoso Peter, mira que chiquitín-me señaló otra foto y volví a reír.

____________________________________________________________


ME PARECE QUE QUEDAN DOS CAPÍTULOS, NO PUEDEN PERDERSELOS!!!!
Y decirles que acá empieza una nueva y original novela de mi amiga Cielo:
http://amorencopos.blogspot.com.ar/ 
lean sobre que trata y firmen si les gusta!!

Muchos besosss!